Kanye West - 808s and Heartbreaks

Kanye West – 808s and Heartbreaks
por Hector Herrera
“Mas que un artista, soy una persona real. Y las personas reales crecen”
Kanye West

Después de su multi aclamado Graduation , Kanye (kanyei) West nos presenta su ultima producción titulada 808s and Heartbreaks. Un titulo con mucho fondo pues en este trabajo el sr. West limita sus recursos y basa sus nuevas composiciones en la roland tr-808, una de las primeras cajas de ritmos que se ha vuelto legendaria y de culto entre los hip hoperos mayormente por su sencillo, original, flexible y característico sonido, claro haciendo uso también de sintetizadores, pero cuidando el sentido igualmente retro y minimal.

¿Qué es lo original aparte del titulo y el contenido rítmico? Pues esta vez, el ser que muchos califican como hip hopero se pone a cantar en cada una de las piezas que conforman la producción. Kanye canta. Tal vez no, la voz no es su fuerte, pero hace uso de otro efecto en su voz que completa el concepto, el autotune.

El autotune es esa voz robótica que escuchamos primero con Cher, Daft Punk y que ahora es exageradamente recurrida en las producciones no solo de hip hop sino de reggateon y hasta pop.
Pero más que hacerlo sonar genérico y aburrido, añade un aire muy característico a las melodías. Cada rola suena minimal, robótica, fría y oscura. También por su contenido letristico que reflejan fuertes experiencias que el posible productor del último disco de Michael Jackson vivió durante los últimos años como la muerte de su madre en una intervención quirúrgica. Pero también dichas melodías están cargadas de un extraño sentimiento y emoción que vale la pena ser escuchado.

Para mi gusto, este disco es un oasis dentro de una industria moribunda y ciclada en sus propuestas. Resulta un disco que me recuerda a Kraftwerk, a los francesitos Daft Punk y me da una idea del futuro trabajo de Michael Jackson que ya no veremos.

Canciones como “Welcome to Heartbreak” me hacen pensar eso y bueno la mejor manera de apreciarlo es escucharlo y comenzar con “Love Lockdown”, primer sencillo que resume bien la actitud del disco. Un beat parecido al latido de un corazón estremece el inicio mientras la voz de Kanye resulta escalofriante y llena de feeling. Me recuerda a “In The Air Tonight” de Phil Collins, y cierra con unos ritmos tribales hipnóticos.

Si no es de su agrado, escuchen Robocop y se darán cuenta de que este hip hopero es un artista que propone, promete y cumple. Y tal vez pueda llegar a ser el mejor artista de su generación como el se lo plantea.

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Kanye West golpea nuevamente y el que golpea primero lo hace 2 veces.

That’s enough Mr. West no more today.