EL ARTE DE LA SEDUCCIÓN
(Robert Greene, 2001)
Por Héctor Armando Herrera
Después de editar unos
años atrás “Las 48 leyes del poder” el autor especialista en estrategia Robert
Greene repite su exitosa formula con un nuevo libro esta vez dedicado, como su
nombre lo indica, al arte de la seducción. Pero esto, al igual que su libro
pasado, parece ir más allá de ser un simple manual adornado de frases
trilladas, positivistas y levantadoras
de ánimo, confianza y autoestima. Lejos de ser una “aspirina existencial” como
la mayoría de de los libros de superación y psicología, este compendio de
estrategias realmente se propone decodificar el proceso de conquista y
seducción, no solo a manera de cortejo con el sexo opuesto, si no como un
camino para lograr cualquier objetivo que tengamos a nivel personal.
El método es el mismo
que presentó en su trabajo anterior, leyes o aforismos sostenidos por relatos
históricos de célebres personajes y seductores que las historia nos ha regalado
como Giacomo Casanova, Richeleu o Cleopatra. También nos expone las actitudes
de celebres artistas como Andy Warhol y Marlene Dietrich con el fin de
encontrar los procesos que mantuvieron su enigmática personalidad durante su
carrera. La investigación resulta ser interesante y expone una perspectiva
diferente de cómo podemos trazar un camino haciendo uso de la paciencia y el
trabajo constante día a día para ir mejorando hacia nuestras metas.
Este libro es un
excelente destructor de paradigmas o ideas preconcebidas. Nos alienta a
experimentar nuevos procesos y métodos. Hace hincapié en que solo a través de
la paciencia y paso a paso es como se acrecenta un nivel mas es nuestras
experiencias y sobre todo nos sugiere que la adversidad es un obstáculo el cual
hay que aprender a apreciar pues es el indicador de nuestras limitaciones y la
guía de los pasos a seguir para transformarlas y transformarnos interiormente.
Si no conoce a Robert
Greeene lo invito a darse la oportunidad y estoy seguro que, si no se deshace
de viejos comportamientos inútiles para bien, al menos será una persona más
culta y con mayor conocimiento de la historia artística y universal.